Entre los meses de enero y marzo de 2021, en colaboración con los grupos que elaboramos este informe, se registraron y documentaron 117 incidentes de hostigamiento que afectaron a 126 víctimas: 40 mujeres, 85 hombres y 1 persona que se autoidentifica como no binaria.

Según nuestros registros, 64 personas habían sufrido más de un acto de hostigamiento, lo que indica que se mantiene la sistematicidad del hostigamiento contra los diferentes grupos de la sociedad civil.
La mayoría de los actos de hostigamiento y amenazas estaban relacionados con detenciones arbitrarias, operativos de vigilancia y reclusiones domiciliarias ilegales, acoso y violencia en línea, corte de servicio de datos de Internet para impedir la comunicación, así como para evitar que se asociaran y reunieran, o que realizaran o asistieran a eventos organizados por grupos de la sociedad civil.
En al menos 11 casos se documentaron actos en los que los agentes del Estado emplearon la fuerza y la violencia. Los incidentes más violentos registrados en el periodo estuvieron relacionados con actos de repudio donde los manifestantes hicieron uso de discurso de odio y violencia verbal contra los activistas a quien llamaron mercenarios, apátridas, etc. Estos mítines de repudio comenzaban al anochecer y terminaban a las 9:00 PM.
Los operativos de vigilancia fueron establecidos con la intención de confinar a los activistas en sus hogares y con ello impedirles participar en manifestaciones.
Fueron establecidos de forma selectiva o por simples sospechas. Influía el tipo de relación o asociación con los artistas independientes del Movimiento San Isidro (MSI) y el 27N, los artistas, grupo social más afectado por los actos de hostigamiento, seguido de los periodistas.
Al menos tres personas resultaron detenidas y sometidas a tortura, tratos crueles y degradantes. Entre las técnicas identificadas se detallaron:
- Exposiciones a altas temperaturas bajo el sol, encerradas en un vehículo herméticamente cerrado, por varias horas, que provocaron síntomas de deshidratación.
- Interrogatorios donde los agentes utilizaron la coacción y la amenaza como método de castigo para amedrentar a los participantes. Esta técnica también fue utilizada para intimidar a sus familiares, quienes fueron previamente citados ilegalmente o visitados en sus casas.
- Al menos tres mujeres denunciaron que fueron obligadas a desnudarse y sometidas a tocamientos incómodos e innecesarios con el objetivo de humillarlas y degradarlas.
La trasmisión en vivo de las detenciones es una de las buenas prácticas utilizadas por los activistas monitoreados que permitió la documentación e identificación de los perpetradores de violaciones de derechos humanos, en su mayoría agentes del Estado pertenecientes al Ministerio del Interior, específicamente a los departamentos de Seguridad del Estado y Policía Nacional Revolucionaria.
Las detenciones fueron de corta duración, menos de 24 horas, durante las cuales los detenidos fueron sometidos a desapariciones forzadas, pues ninguna estación de policía consultada telefónica o presencialmente por amigos y familiares, pudieron informar del paradero de la persona detenida.
Esta información ha permitido al equipo legal de Cubalex documentar las detenciones arbitrarias y desapariciones forzadas. En la mayoría de las veces el número de Emergencia de la PNR o directamente a las estaciones policiales, negaron que los activistas se encontraban detenidos. Adicionalmente los mantuvieron incomunicados impidiendo avisar a sus familiares sobre la detención.
Los derechos más afectados durante este periodo fueron la libertad y la seguridad personal, que implican las violaciones de otros derechos como el derecho a no ser detenido, a no ser víctima de tortura y malos tratos, la libertad de movimiento, opinión, expresión, reunión, asociación y manifestación.
La mayoría de las violaciones fueron denunciadas en La Habana (Habana Vieja, Movimiento San Isidro) y en Santiago de Cuba (frente a la sede de UNPACU en Altamira). Aunque se registraron actos de hostigamiento casi a diario, se pudieron identificar fechas en las que las autoridades incrementaron las acciones represivas.
El 27 de enero de 2021, jóvenes artistas intentaron nuevamente reunirse con las autoridades del Ministerio de Cultura. La Seguridad del Estado detuvo a varios y a otros los sitió en sus casas para impedirles que salieran a la calle.
Los jóvenes que se encontraban frente al MINCULT fueron agredidos por funcionarios de esa institución, incluidos el ministro y dos viceministros. Acto seguido fueron detenidos con violencia, golpeados fuertemente, retenidos e interrogados durante varias horas. A dos de las mujeres las desnudaron y las tocaron inapropiada e innecesariamente. En los siguientes días, varios artistas convocaron a una protesta pacífica frente al Capitolio, sede del órgano legislativo, exigiendo la dimisión del ministro de Cultura.
Entre el 19 y 20 de febrero se incrementó la represión de los agentes del Estado cuando un grupo de activistas en defensa de los derechos de los animales (conocidos como los “animalistas”, se manifestaron pacíficamente frente al Ministerio de la Agricultura en la mañana, tras lo cual se efectuaron detenciones arbitrarias y se organizaron operativos de vigilancia a otros activistas que las autoridades sospechaban podían sumarse a los manifestantes.
El 16 de febrero, artistas cubanos lanzaron el tema musical “Patria y Vida” que se viralizó rápidamente en las redes sociales. El tema fue considerado una provocación al gobierno comunista y sufrió ataques tanto en el sistema informativo de la televisión cubana como en los medios oficiales. Los activistas pintaron la frase en las fachadas de su casa y en sus torsos. Entre los primeros días de marzo el gobierno organizó a manifestantes afines al grupo político en el poder que realizaron mítines de repudio frente a los domicilios de los activistas que compartieron en sus redes sociales fotos con la frase “Patria y Vida” en sus cuerpos y hogares.

El 8 de marzo, “Día Internacional de la Mujer”, más de una decena de activistas, en su mayoría mujeres, fueron sometidas a vigilancia y reclusión domiciliaria. Las personas que intentaron salir fueron arrestadas, algunas violentamente. Entre el 12 y el 15 de marzo se incrementó la represión para impedir que los activistas salieran de sus casas, bajo la sospecha de que participarían en una supuesta protesta organizada secretamente, según se informó en la emisión estelar del noticiero nacional de televisión (NTV) en la noche del 11 de marzo. Según el locutor y represor, miembro del Comité Central del Partido Comunista (PCC), Humberto López, la protesta se realizaría en la Plaza de la Revolución, en solidaridad con Luis Robles, ciudadano encarcelado por manifestarse con un cartel con frases exigiendo Libertad y el fin de la represión, además de la libertad de otro joven prisionero de conciencia Denis Solís, miembro del Movimiento San Isidro. El periodista expuso los rostros de 6 activistas en la pantalla mientras los desacreditaba y amenazaba con acusaciones legales donde les serían aplicados varios artículos de la Constitución cubana que criminalizan la libre expresión y manifestación, así como otros del Código Penal.
Entre enero y marzo de 2021 Cubalex registró y documentó 117 incidentes de hostigamiento que afectaron a 126 víctimas: 40 mujeres, 85 hombres y 1 persona que se identifica como no binaria.
Según nuestros registros, 64 personas habían sufrido más de un acto de hostigamiento, lo que indica que se mantiene la sistematicidad del hostigamiento del Estado contra grupos de la sociedad civil.


Los artistas independientes integrados o relacionados con el Movimiento San Isidro (MSI) y el 27N fueron el grupo social más afectado. Los artistas fueron un foco de actos de hostigamiento, seguido de los periodistas.
La mayoría de los actos de hostigamiento y amenazas estaban relacionadas con detenciones arbitrarias, operativos de vigilancia y reclusiones domiciliarias ilegales, acoso y violencia en línea, corte de servicio de datos para impedir la comunicación, para evitar que se asociaran y reunieran, así como realizaran eventos organizados por grupos de la sociedad civil. En al menos 11 casos se documentaron actos en los que los agentes del Estado emplearon la fuerza y la violencia.


El derecho más afectado durante este período fue la libertad y la seguridad personal, que implican las violaciones de otros derechos como el derecho a no ser detenido, a no ser víctima de tortura y malos tratos, la libertad de movimiento, opinión, expresión, reunión, asociación y manifestación.


Línea de tiempo – hitos en la represión
Enero
El 27 de enero de 2021, jóvenes artistas intentaron nuevamente reunirse con las autoridades del Ministerio de Cultura. La Seguridad del Estado detuvo a varios y a otros los sitió para impedirles que salieran de su domicilio. Los jóvenes que se encontraban frente al MINCULT fueron agredidos por los funcionarios de esa institución, incluidos el ministro y dos viceministros. Acto seguido fueron detenidos con violencia, golpeados fuertemente, retenidos e interrogados durante varias horas. A dos de las mujeres las desnudaron y las tocaron. En los siguientes días varios artistas convocaron a una protesta pacífica frente al Capitolio, sede del órgano legislativo, exigiendo la dimisión del ministro de Cultura.

Febrero
Entre el 19 y 20 de febrero se incrementó la represión de los agentes del Estado cuando un grupo de activistas en defensa de los derechos de los animales se manifestaron pacíficamente frente al Ministerio de la Agricultura, se efectuaron detenciones arbitrarias y se organizaron operativos de vigilancia a otros activistas que las autoridades sospechaban podían sumarse a los manifestantes.

Marzo
El 16 de febrero artistas cubanos de primer nivel lanzaron el tema musical “Patria y Vida” que se viralizó en las redes sociales. El tema fue considerado una provocación al gobierno comunista. Los activistas pintaron la frase en las fachadas de su casa y en sus torsos. Entre los primeros días de marzo el gobierno organizó a manifestantes afines al grupo político en el poder, quienes organizaron mítines de repudio frente a los domicilios de aquellos activistas que compartieron en redes sociales fotos en los que hacían uso de la frase “Patria y Vida” en sus cuerpos y hogares.
El 8 de marzo “Día Internacional de la Mujer”, más de una decena de activistas, en su mayoría mujeres, fueron sometidas vigilancia y reclusión domiciliaria. Los que intentaron salir fueron arrestados, algunos violentamente. Entre el 12 y el 15 se incrementó la represión para impedir que activistas salieran de sus viviendas, bajo la sospecha que participarían en una supuesta protesta organizada secretamente, según se informó en la emisión estelar del noticiero nacional en la noche del 11 de marzo.
Según el locutor Humberto López la protesta se realizaría en la Plaza de la Revolución en solidaridad con Luis Robles, preso por manifestarse con un cartel con frases exigiendo libertad de Luis Denis y el fin de la represión. El periodista expuso los rostros de 6 activistas mientras los desacreditaba públicamente en el Sistema informativo de la televisión cubana.

Nota: Este informe es un trabajo de colaboración entre la Red en Defensa de los Derechos Humanos y Cubalex. Los datos reflejados en el mismo son resultado del proceso de recopilación de información de los activistas de la red con las personas que dieron su consentimiento para que sus datos personales fueran registrados en nuestra base de datos DiDi, implementada por la organización sueca Civil Rights Defenders.